sábado, 17 de noviembre de 2012

Capitulo 75: Perdón

Narrado por Pablo:

Llegué con unas ganas horribles de verla. No podía aguantar ni un solo segundo mas. Allí la vi, esperándome. Salí por otra puerta así como yo llegué por detrás suyo no se percató de mi presencia hasta que pudo notar mis manos en su cintura, y de una manera extremadamente dulce nos besamos. Nos besamos con los labios pero des de el alma a corazón abierto. Deseaba tanto que mis labios rozaran los suyos... Que no me di cuenta que allí me esperaba alguna que otra fan así que sin pensarlo mas las fui a atender durante unos segundos.
La verdad que no me hacía realmente ilusión pero era algo obvio que se habían percatado de todo así que me llenaron a preguntas a las cuales desviaba las respuestas... "Tengo derecho a tener mi vida privada, chicas. Lo siento pero me entendéis que no os vaya a contestar nada sobre eso" -les dije aquello de la mejor manera posible-
Estuve un largo rato con ellas pero me despedí y me fui donde se encontraba Jenny. Nos dirigimos hacía a fuera y cogimos un taxi. Jenny esta vez me dijo que no ibamos a dormir en su casa -milagro de dios- era insoportable lo mal que me trataba su hermano. Así que al llegar a su casa tan solo recibí saludos de su padre y su madre, en cambio él ni siquiera apareció. Recogimos las cosas y nos fuimos a casa de su tía. Tenía un duplex precioso. Con jardín incluido. Entramos a casa.
Llevaba días con aquella canción entre manos y tenía que enseñársela a ella. Esperaba que le gustase. Me dejó una guitarra y yo enseguida me arranqué a cantar. A los pocos minutos pude ver como Jenny estaba entre lagrimas, pero seguí. Hasta que ella... Me paró. Me pidió que no siguiese y enseguida vi como se ponía de los nervios. Empezaba a temblar y no entendía de todo el por que. Tan nerviosa se puso hasta tal punto que no pude controlarla. Y me lo soltó, así sin mas. Noté como por dentro se hacía pedazos la palabra desilusión contra la de amor. Me quedé en shock. No podía articular palabra.
Nuestros momentos juntos se me pasaron como si de una película rebobinada al máximo se tratase, en mi cabeza rebotaba la palabra "perdón". No tenía ni la menor idea de que contestarle, que decirle , que preguntarle ante aquello que había dicho.

- Gracias por hacer que mi vida caiga en picado, confiaba en ti. -le dije aquello y me levanté marchando hacía el jardín.

Allí me senté durante un rato. Jenny no salió. Supongo que entendía mi situación y quería que pensase en ello. Y lo hice, si, mas que nada no dejaba de pensar en ello. "He besado Rubén". Necesitaba la respuesta a la pregunta de por que lo había echo. Así que después de mas de media hora de estar debatiendo conmigo mismo, volví hacía adentro.
Entré al salón, no había nada de ruido -me extrañé-. Subí hacía arriba pero al llegar allí no daba crédito a lo que veía. Me tiré al suelo hacía donde estaba tirada Jenny. No respondía ante mi llamada insistente. No respondía a nada. El pulso estaba débil.

- No puedo mas esto me supera. -dije entre sollozos- Te quiero, no puedes dejarme.

No despertaba. Así que llamé a la ambulancia rápidamente. Vinieron enseguida

Narrado por Jenny:

Después de decir aquello, Pablo, se levanto y se dirigió hacía el jardín. Decidí dejarle solo para que pudiera meditarlo... Estaba mas arrepentida que nunca.
En aquel momento me relaja tanto y de golpe que el cuerpo me empezó a pesar. Subí como pude hacía arriba para poder tumbarme. Llegué con todo el esfuerzo pero cuando quise meterme en la cama se me nubló la vista y sentí un fuerte golpe.

Narrado por Pablo:

Ya llegamos al hospital, pasaron su camilla mientras a mi me dejaron en aquel frío pasillo. Sin respuesta alguna.
Decidí llamar a su madre. Intenté tranquilizarle mientras le explicaba lo que estaba pasando. No lo logre a grandes rasgos pero lo intenté. En cuestión de media hora aparecían por la puerta del hospital.

- Pablo, que ha pasado? -dijo su madre.
- Eso me gustaría saber a mi. No estaba con ella cuando le pasó lo que sea que le haya pasado. Discutimos... y... -me cortó su madre.
- Da igual! Tranquilo no pasa nada. Se pondrá bien. -quiso tranquilizarme. Lo consiguió de cierto modo pero no del todo.

En el aquel preciso momento las puertas blancas, por las cuales se habían llevado a Jenny, se abrieron y detrás salió el mismo médico que se llevó la camilla. Nos miró a nosotros y se acercó.

- Familia de Jennifer, verdad? - Dijo.
- Si! Ellos son sus padres... yo soy su novio. Como está... ? -Dije con cara de preocupación, alterado ante la situación.
- Tranquilicese, Jennifer está estable. Aún no ha despertado. Ha sufrido una conmoción cerebral. Seguro que fruto del mareo dio contra algo, por eso no despierta. Pronto lo hará. -Esas palabras se clavaron una a una en mi. No podía ser... aún ni siquiera había despertado.- Pueden entrar pero no todos de golpe, gracias. -Y detrás esas palabras, se fue.

Pedí a sus padres que entraran ellos primero, necesitaban verla. Lo notaba en su mirada. Yo en cambio necesita airear la mente. También tenía ganas de verla... pero debía dejarles a ellos primero, y así fue. Ellos tras insistir entraron primero y yo bajé hacía la puerta del hospital y me senté en uno de los bancos que había allí mismo. No podía mas, no soportaba mas todo esto. Llevaba tan solo horas junto a ella y todo se había ido por la borda. Ahora mismo no me preocupaba nada de lo que me había dicho sobre Rubén, ahora lo que me importaba era ella.
Estuve allí sentado cerca de 1 hora, solos yo y mi pensamiento. Cuando me dí cuenta que los padres de Jenny estaban en la puerta del hospital mirando hacía los lados para ver si me encontraban. Me acerqué a ellos.

- Ya puedes entrar tu, cariño. -Me dijo su madre cogiendo mi mano.
- Muchas gracias Maria... Lo siento.. debí.. -Me cortó enseguida su padre.
- Debiste NADA! Tu lo das todo por ella y lo sé. He aprendido a verlo, a verlo en tus ojos. Todo lo que la quieres. Tu no tienes la culpa de nada y lo sabemos. -Dijo.
- No se que deciros.. en estos duros momentos. No tengo palabras. -Dije sin animo.
- No tienes nada que decir.. tan solo sube arriba y anímale  Estoy segura que contigo al lado despertará. Necesita tu presencia.

Eso hice, me despedí de ellos y subí a la habitación. No se por que razón pero con nervios en mi. Llegué a la planta y me dirigí a la habitación. Abrí la puerta lentamente. Me quedé a unos metros de ella observándole. "Estas preciosa..." -Pensé. Como habían dicho tenía aún sus ojitos cerrados, la manta tan solo le tapaba hasta la cintura y colocadas las manos por fuera.
Me acerqué aún mas a ella... le cogí la mano y en aquel mismo momento recordé el estribillo de otra de mis canciones que tenía a medio hacer y salió solo.

"Quién abrirá la puerta hoy para ver salir el sol sin que lo apague el dolor que me dejó aquella obsesión, de tu corazón con mi corazón, de mis manos temblorosas arañando el colchón. Quién va a quererme soportar y entender mi mal humor. Si te digo la verdad no quiero verme solo."






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