miércoles, 13 de junio de 2012

Capitulo 64: Si me olvidas

Caminé detrás de Pablo siguiéndole hasta el estudio. Abrió la puerta y aquello estaba tal cual lo dejamos aquel día.
- Este sitio misterioso.. -Pablo comenzó a reírse- No no yo no me río. -Comencé a reírme.
- Como que no? -Pablo se acercó a mi. Preparando sus manos- Y ahora? -Comenzó a hacerme cosquillas.
- Pablo! No.. -No podía parar de reír- No, no! No puedo mas! -Cada vez me reía mas, no aguante mas y me tiré al suelo.
Pablo cayó encima mio dejándome de hacer cosquillas, acarició mi mejilla y nuestros labios unieron esa pasión que sentíamos los dos.
- Sabes que? -Le dije a Pablo.
- Dime, cariño.
- Que pesas un poquito eh? -Comencé a reírme y dí un pequeño empujoncito a Pablo.
Pablo se hizo el enfadado y se levantó del suelo. Yo, me quedé sentada allí con la espalda apoyada sobre el sofá blanco. Miraba a Pablo, se había sentado en el piano pero simplemente miraba su libreta de canciones. ¿Buscaba algo? ¿Iba a tocar? Dejé que siguiera buscando. No me dijo nada. Paró de golpe en una pagina y colocó el libro encima del piano y comenzó a tocar las primeras notas... Me sonaba tanto aquella melodía... pero no sabía decir que canción era. Me quedé endulzada viendo como sus dedos acariciaban con tanta delicadeza cada tecla de aquel piano. De repente tras minutos de escuchar esa melodía comenzó a susurrar algo. Me levanté quise escucharle de cerca... pero no me acerqué del todo a él. Me quedé detrás y empezó a cantar.

"Llevo el sol de equipaje de mano, me vine sin pensarlo demasiado. Te imagino ahí, despidiéndome, y se me coge un pellizco que aprieta. Llevo la sonrisa forzada y el alma un poquito en alerta, por que derribaron mis botes, quedé flotando en mar abierta. Si me olvidas vivirás tranquila tendrás planes y proyecciones. Si me olvidas no habrán remolinos, ni altibajos de emociones. Por que el momento de encontrarnos llegó en plena tormenta, y aunque mis velas te buscaban mi dirección estaba quieta..." 

Siguió tocando aquella canción. Era precioso lo que había dicho. Aquella canción era de Vanesa Martín, vino a mi memoria. En mi cara se dibujó una simple sonrisa que nada me la podría borrar. Sin girarse hacía a mi dejó de tocar. 

- Sabía que te gustaría. -Me dijo sin aún girarse. 
Me acerqué hacía él y le abracé por detrás poniendo mis brazos sobre sus hombros. 
- Te quiero. Es preciosa cada nota que tocas con tal dulzura, no he visto persona que... -De repente se giró ante mi y me calló besándome.
- No hace falta que me digas nada mas... -Me dijo al deshacer aquel beso.

No pude decirle nada mas, como él me dijo. Me dejaba sin palabras. Mi mundo había cambiado de un día para otro. Me encantaba vivir la vida así, a su lado. Esos remolinos de los que había nombrado en la canción... era lo mejor de mi vida en este momento. Vivir aquello a su lado. Aquellos remolinos llevaban dulzura. Eran nuestros remolinos. Mis preferidos remolinos. Me encantaba la parte en la que íbamos de aquí para allá. Siempre había soñado eso. Siempre soñé pisar tierras andaluzas y con él se estaba convirtiendo en mi segunda casa. Había echo todo mi sueño realidad, había echo todo por mi. El estar al lado de alguien como él y pisar aquella maravillosa tierra llena de rincones mágicos que te llenan el alma. Sentirte andaluz en cada poro de tu piel... era tremendamente increíble. No quería que se acabara este maravilloso sueño nunca. No quiero despertar.

Volví en si, me había metido tanto en mis pensamientos que.. no me enteraba de que mi móvil estaba sonando. Pablo deshizo su abrazo y me dio el móvil.

- Cariño! Es Rubén -Me dijo y de repente reaccioné.
- Rubén? Que pasará? -Me puse nerviosa.
- Pero cógelo y no te pongas en lo peor!! -Me dijo Pablo, y descolgué.


"Rubén?"
"Si, ese soy yo!"
"Que pasa? Te ocurre algo?" -Estaba temblando pero vi como Pablo intentaba calmarme.
"A mi? Nada? No te puedo llamar sin ningún pretexto? Que tal os va? No se..." -Se rió después de sus palabras.
"Encima se ríe! Yo es que lo mato! Pues perfectos. Aquí por Málaga estamos!" -Le dije.
"Muy bien! y olvidando a la gente que habéis dejado aquí no??" 
"Eres.. erees.. ! No hemos olvidado a nadie! Por cierto.. ¿Quien eres?" -Nos echamos a reír los tres, vi como Pablo se moría de la risa y decía "Que buena es.." y volvía a reírse.
"Muy graciosa! No va... en serio! Cuando volvéis, o vuelves por tierras catalanas?"
"Pues.. me supongo que volveré yo sola por que Pablo tiene este jueves y este viernes concierto. Supongo que ya volveré para allá. Tu no sufras!"
"Estoy totalmente recuperado así que... mi guitarra está esperando." -Me reí.
"Pues si.. no estaría nada mal volver a esa rutina. Tranquilo todo volverá!"
"Si! Tengo ganas de verte."
"Si.. yo también.." -Y recordé lo que dijo Sandra "Por cierto.. tenemos que hablara, vale?"
"Hablar? por que?" -Vi como Pablo puso una cara rara y me supuse que Rubén también.
"Cuando nos veamos mejor.. vale?"
"Esta bien.. me has dejado.. bueno ya me dirás!"
"Bueno Rubén Pablo te manda saludos, nos vamos a descansar un poco!"
"Vale! Hablamos preciosa!"
"Adiós Rubén.. sii Adiós!"

Colgué el móvil. Pablo seguía perplejo delante de mi. Pero se apartó hacia un lado como molesto.

- Tienes que hablar algo con Rubén que no deba saber? -Suspiré ante su pregunta.
- Pablo... no empieces. No va por ahí!
- Entonces por que no se lo has dicho ahora? Que problema hay?
- Pablo en serio... No tengo nada que esconderte. Pero si no me crees.. -Abrí la puerta y bajé las escaleras dirigiéndome hacía a fuera de aquella casa. Una vez en la calle decidí tirar hacía una de las calles que tenía delante.

Noté como Pablo bajó las escaleras tras de mi cuando me fui de aquella casa pero ahora miraba hacía a atrás pero no había nadie. Aquellas calles eran siniestras. No me gustaba nada andar por ahí pero de repente me vi perdida. Caminé durante horas. Pero no conseguí volver a casa de Pablo. Ni si quiera llevaba encima el móvil, no tenía nada para comunicarme con él. Me había perdido y entre aquellas calles no había nadie. Comenzó a oscurecer. Me sentía asustada y sola. Me arrepentía el haberme enfadado con Pablo. Pero sabía que del todo no confiaba en Rubén.. Después de lo que había dicho Sandra era lógico. Pero quien sabe si esa... nos quería hacer daño simplemente. Deduci que ya era tarde por que estaba oscureciendo cada vez mas. Vi como al final de la calle venía alguien, pero no se le veía de buen aspecto así que decidí caminar hacía adelante y sin mirar atrás. No sabía donde meterme por que realmente no me conocía para nada Málaga. ¿Volvía hacía atrás? ¿Que podía hacer? Y Pablo.. no aparecía por ningún lado...




http://www.youtube.com/watch?v=W5-ok1ymm3g Vanesa Martín - Si me olvidas. 

1 comentario: