Capitulo 29: ¿Se conocen?

-Que hay ahí, Pablo? Que pasa? Por que no puedo entrar?
-No pasa nada. Pero deja que en otro momento te lo enseñe, por favor.
-Pero... -Me cortó.
-No hay peros! bajamos a abajo a ayudar a mi madre?
-Vale, esta bien.. que sepas que no me tienes convencida del todo.
-Bueno.. ¿Ahora? -Me dio un dulce beso.
-Mejor.. pero sigo queriendo ver que hay tras esa puerta!
-Tranquila después prometo enseñártelo. Ahora bajemos..

Bajamos hacía la cocina, allí estaba su madre llevando las ultimas cosas hacía la mesa del comedor, le ayudamos a llevar algún que otro plato hacía allí y cuando ya todo estaba a punto Salva apareció por las escaleras y dijo:
-Amanda ya esta aquí! La acabo de ver llegar con el coche! -Me quedé con cara de sorprendida tras esas palabras. ¿Amanda? La Amanda que yo había conocido en el aeropuerto? Era ella? Ella era su hermana? Ya lo comenzaba a entender todo, todo encajaba. De repente una niña entró corriendo por la puerta hacía Pablo, era Lucia. Me quedé mirando hacía la puerta con una gran sonrisa y vi como aparecía Amanda, me miraba y nos acercamos las dos abrazándonos fuertemente mientras oía que decían: "Se conocen?". Pues si, si la conocía, ademas me daba la sensación de que toda la vida.

-Que fuerte me parece Jenny! Así que tu eres la chica de la que me habló mi hermano? madre mía! Que coincidencia de verdad, que cosas tiene la vida.
-Si! Que alegría de verte, ves.. ya no te tengo que llamar, prometí verte y aquí estoy. -nos echamos a reír, pude ver como Pablo y los demás estaban también realmente sorprendidos.
-Pero ella era la chica que conociste en el aeropuerto? -Se incorporó Pablo.
-Si, era ella, es tu hermana!

A Lucia ya le parecí familiar así que con tan solo acercarme ella me abrió sus brazos y la cogí, me dio un dulce beso en la mejilla. Era espectacular aquella niña, era dulce, era muy cariñosa y se notaba el amor que tenia por su tío y él por ella también. Me encantaba esa relación tío-sobrina que tenían. Era preciosa, era muy gracioso ver a Pablo jugando con ella, haciéndole cosquillas, sintiéndose que era un niño mas. La verdad que lo era, ante su apariencia su alma seguía siendo de niño. Saludé también a Pedro al marido de Amanda, ya no hicieron falta las presentaciones ante nadie, ya nos conocíamos todos. Tan solo faltaba esperar al padre de Pablo.

-Mama, y.. papa aún no llega que hacemos? Quieres que le llame?
-Si! Llamale haber por donde anda y si llega a comer o empezamos nosotros.
-Vale, ahora vengo.. salgo fuera a llamarle. Pero eh, no me la intimidéis. -Me dio un beso antes de irse.

Pablo salió.. y Amanda empezó a hablarme.

-Entonces mi hermano es el chico por el cual la locura de amor de la que me hablaste, no? Los dos estáis locos entonces.
-Jajaja si, la verdad que si! No sabes por el mal trago que he tenido que pasar.. para explicar todo esto a mis padres. Claro.. Pablo es alguien normal para vosotros pero para los demás no.. entonces cuando lo explique a mis padres.. se pusieron por las nubes y primero me prohibieron ver mas a Pablo, pero.. mi madre luego habló conmigo y con Pablo y ya lo solucionamos todo, la verdad que esta muy contenta.
-Que poder de convicción que tiene mi hermano, si señor!. -Dijo Salva.
-La verdad es que si, eh! Yo creo que si Pablo no hubiera hablado con mi madre...
-Bueno tu tranquila, ya esta. Ya estas aquí, todo arreglado con tu madre, todo perfecto.. -Dijo la madre de Pablo.
-¡Anda! Hablando de mi madre! Tengo que llamarla! Me mata! jajaja Ahora vengo.

Salí corriendo hacía fuera de la casa mirando el móvil, iba corriendo, mi madre me iba a matar! Ya había llegado y aun no le había llamado. De repente ¡pum! Pablo y yo nos chocamos.

-Pero que pasa? Nos volvemos a chocar? -Dijo Pablo.
-No dejas de chocarte conmigo eh! En todos lados. -Dije sonriendole.
-Donde vas tan deprisa, princesa?
-Voy a llamar a mi madre, cariño, que aún no la he llamado y si no me mata!
-Eres un caso, tienes una cabeza..
-Eh! No te metas conmigo, gamberro!
-Yo? No por favor! -se rió- Te quiero y lo sabes. Voy para adentro!

Él se fue para adentro y yo estuve hablando con mi madre un rato, le conté que tal el viaje, lo que había pasado con la hermana de Pablo, le expliqué cada detalle de la casa, como me encantaba de todo lo que estaba rodeada. Acabé de hablar con mi madre y entré adentro de la casa, pero antes vi como un coche se acercaba a la entrada de casa. Así que nada mas entrar dije:

-Creo que viene Salvador, acabo de ver un coche aparcando.
-Pues si, debe de ser el por que me acaba de decir que estaba en el coche llegando.

Vimos como si que era él, abrió la puerta y se dirigió hacía el comedor. Miró a todos con una amplia sonrisa y se dirigió a Ester y le dio un beso. Me encantó ese momento. Miró a Pablo y me vio a mi, se acordó de que hoy Pablo venia acompañado y se presentó.
-Ay! Que despistado soy, hola cariño! Soy Salvador, Salva, papa.. como quieras! -Nos empezamos a reír todos- Llamame como quieras.
-Encantada! Bueno yo Jenny! -Estaba muy nerviosa ante Salvador. No sabía por que pero lo estaba.

En cuanto Salvador se presentó nos pusimos a comer, se notaba que Pablo y Salva eran iguales. Como engullían, mi pregunta era.. ¿Luego donde guardaban esa comida? Por que se conservaban los dos como unos figurillas. Yo quiero ese secreto si, si! Pasamos la comida hablando, con alguna que otra risa de por medio, Salvador no paraba de explicarme anécdotas de Pablo de pequeño. Yo no podía parar de reír, aquella familia era espectacular. Como ya había dicho.. su buena energía te atrapaba.
Después de comer Pablo y yo decidimos subir a la habitación. Yo, al llegar a la habitación me tumbe en su cama.

-Tienes sueño, amor? -Me dijo Pablo.
-La verdad es que estoy un poco cansada del viaje.
-Quieres que durmamos un poco?
-Vale! Pero con una condición!
-Que condición? -Pablo se tumbo a mi lado.
-Que luego me enseñes que hay detrás de esa habitación!
-Madre mía, te ha dado con la habitación eh! Si, de verdad.. que luego te la enseño!
-Vale.. ya no me pongo mas pesada... -Me dí la vuelta, dándole la espalda a Pablo. Pero pude sentir como Pablo ponía su brazo encima de mi cintura, me abrazaba y me acercaba a él. Y así.. nos quedamos dormidos..